El rey Carlos III esperó siete décadas para llegar al trono. Sin embargo, la vida le jugó una mala pasada y al año y cuatro meses de asumir, un cáncer le está poniendo trabas en el camino. Aparentemente este problema de salud no será un proceso corto para el monarca y sus familiares no ocultan la decepción que oculta el hijo de la reina Isabel, ya fallecida.

Desde su entorno señalan que el rey Carlos está “enormemente frustrado” porque los médicos le informaron que el tratamiento será un poco más largo de lo esperado. Esta información fue revelada por su sobrino, Peter Philips, en una entrevista. El hijo de la princesa Ana se mostró abierto en una conversación y reveló que el monarca está “presionando” a sus médicos para que le permitan realizar más actividades para poder reincorporarse antes a sus labores.

El rey Carlos fue operado de la próstata y en ese momento se le descubrió el cáncer. A pesar de eso sigue recibiendo autoridades en el palacio de Buckingham y supervisando los documentos oficiales. Sin embargo, su sobrino asegura que el Rey está decepcionado porque no puede mantener el ritmo de trabajo que tenía antes de contraer la enfermedad. “Es muy pragmático, entiende que hay un período de tiempo en el que realmente necesita concentrarse en sí mismo”, señaló Peter.

Así es la rutina del Rey Carlos III durante su tratamiento contra el cáncer

Desde su equipo trascendió que el rey Carlos, pese a la enfermedad, constantemente los mantiene en alerta con sus ideas y sugerencias. Antes, el monarca se saltaba los almuerzos para no perder tiempo y le gustaba trabajar hasta altas horas de la noche.

Hay que recordar que Peter Philips es el hijo de la princesa Ana y del capitán Mark Phillips, quien fue su primer marido. En la entrevista aseguró que la “ética de trabajo”, tanto de la princesa como de su padre fueron muy influyentes en su vida y en la de su hermana. Además, con la enfermedad del rey Carlos y de Kate Middleton, aseguró que la familia necesita del compromiso de la princesa Ana.