Miss Estados Unidos, R'Bonney Gabriel, fue coronada a mediados de enero de este año como Miss Universo en Nueva Orleans (sur de EEUU), con la misión de ser la cara de la nueva etapa de la organización enfocada en defender la equidad de género y los derechos de las mujeres, pero recientemente ha tenido que renunciar a su corona. 

La joven le dio a Estados Unidos la novena corona, convirtiéndolo en el país con más triunfos en el concurso de belleza internacional. Sin embargo, ha declinado el honor de portar el título de Miss EEUU porque su agenda como Miss Universo no le permite cumplir las responsabilidades como representante del país norteamericano.  

Es que la agenda de Miss EE.UU. es bastante apretada, ya que Gabriel debía cumplir con varias actividades en diferentes ciudades estadounidenses. Y al no poder asistir a esa programación, ha preferido desistir del título y dejarle la corona a Morgan Romano, quien fue la primera finalista representando a Carolina del Norte en el certamen de belleza.

El pasado viernes 27 de enero, a Morgan se le hizo entrega de la corona como Miss USA, en el Gogue Performing Arts Center en Auburn de Alabama.  

Por su parte, R'Bonney Gabriel deberá dedicar un año al concurso y mudarse a Tailandia, donde está la sede del concurso desde este año.

Las otras dos reinas de belleza que la sucedieron en el concurso, Miss Venezuela Amanda Dudamel y Miss República Dominicana Andreína Martínez, también correrán la misma suerte y deberán instalarse en el país del sudeste asiático.

Gabriel fue coronada por su antecesora, la india Harnaaz Sandhu, con la nueva corona 'Force for Good' (Fuerza para el bien), que tiene 993 piedras preciosas y un zafiro de 45,14 quilates.

La nueva dueña de la Organización Miss Universo, la multimillonaria tailandesa Anne Jakkaphong Jakrajutatip, aseguró que este sábado comenzaba “una nueva etapa del Miss Universo, hecho por mujeres para mujeres” y relató como había “transformado el dolor” de haber sido rechazada como mujer transgénero.

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