Los gatos, con su naturaleza misteriosa y comportamientos únicos, a menudo capturan la atención y el cariño de sus dueños. Entre sus hábitos más curiosos se encuentra su predilección por dormir sobre las personas con las que conviven. Esta conducta, que resulta tanto encantadora como intrigante, ha sido objeto de fascinación para los entusiastas de los gatos durante mucho tiempo

Tal y como ha demostrado la ciencia, los gatos buscan comodidad y seguridad, y dormir sobre sus dueños les ofrece ambas. Además, los gatos son criaturas de hábitos y rutinas; por lo tanto, este comportamiento puede ser una forma de fortalecer el vínculo con su humano, pero lo cierto es que hay muchas otras razones.

5 razones por las que los gatos duermen encima de sus dueños

1º Búsqueda de comodidad y seguridad

Desde su nacimiento, los gatos se acurrucan con sus hermanos para obtener calor y protección. Esta costumbre sigue presente en su edad adulta, donde el dueño pasa a ser un sustituto de estos hermanos. Así, dormir encima de los humanos proporciona a los gatos una sensación de calidez y seguridad similar.

2º Conexión emocional y muestra de confianza

A pesar de su fama de independientes, los gatos buscan la conexión física y emocional con sus dueños. Dormir sobre ellos es una demostración de confianza y una forma de fortalecer el vínculo emocional. El contacto físico, como acariciarlos, libera oxitocina, fomentando sentimientos de amor y conexión tanto en el gato como en el humano.

3º El poder curativo del ronroneo

El ronroneo de los gatos no es solo relajante, sino que también posee propiedades terapéuticas. La frecuencia de este sonido puede mejorar la densidad ósea y favorecer la curación, reduciendo el dolor y la inflamación. Además, contribuye a disminuir los niveles de estrés y ansiedad en los humanos, promoviendo un estado de calma y relajación.

4º Instinto de protección

Contrariamente a la creencia popular, los gatos también poseen un instinto protector hacia sus dueños. Al dormir encima de su humano, un gato puede estar mostrando un comportamiento protector, sintiéndose a su vez protegido por su dueño.

5º Preferencia por el calor y la comodidad

Los gatos prefieren lugares cálidos y acogedores para dormir. El cuerpo humano, que emite calor, se convierte en el lugar ideal para que un gato se acurruque. Lugares como el pecho o el estómago del dueño ofrecen no solo comodidad, sino también la oportunidad de estar más cerca de su humano.

Así es como la ciencia ha desvelado uno de los grandes misterios acerca de los gatos, esos animales que pese a tener fama de ser despegados, son sin lugar a dudas unos compañeros de vida excepcionales.