El laurel es una planta que proviene de la familia de las lauráceas, con origen en el Mediterráneo y que se utiliza en las comidas desde tiempo inmemorables. Por su sabor, es un excelente complemento para sumar exquisitez a la mesa, y no menos importante, ser una fuente de beneficios por sus propiedades.

En la salud física, el laurel puede fortalecer el sistema inmune, alivia dolores estomacales, disminuye el colesterol en sangre, previene enfermedades cardiovasculares y disminuye la probabilidad de desarrollar tumores. Es beneficioso en muchos aspectos por lo que, desde hace muchos años, porta un valor crucial en la cocina y en la medicina natural. Por otro lado, es un excelente aliado para la salud mental.

Un poco de laurel para calmar la ansiedad

La ansiedad, desde la psicología, es entendida como ese estado de alerta permanente que se expresa en lo psíquico con pensamientos catastróficos, excesivos e intrusivos; y en lo físico como dolores, temblores, aceleración respiratoria, sudoración, etc; como también un estado de ánimo irritable, acompañado de malestar.

Dicho estado ansioso, puede ser ocasionado por un estímulo externo, es decir que se desencadene por una situación que la provoque como tener que decidir sobre algo importante, pagar las deudas mensuales; o por un estímulo interno, proveniente de los miedos o preocupaciones de cada persona. La terapia, es la herramienta principal para lograr combatir la ansiedad, tan conocida en esta época. También es necesario acompañarla de chequeos médicos.

El laurel, es un ingrediente que puede colaborar con la disminución de la ansiedad. Si lo utilizamos de una manera adecuada y pertinente, lograremos un estado de bienestar y equilibrio emocional. Se ha comprobado que quemar hojas de laurel ocasiona una disminución relevante en el estado ansioso. Sin embargo hay que realizarlo con mucho cuidado. Poder hacer un té con nuestro preciado ingrediente, nos ayudará a hacer uso de sus propiedades y beneficiar la salud física junto con la mental.