POLÉMICAS DECLARACIONES

El Papa asegura que "la homosexualidad no es un delito, pero sí un pecado"

El Papa Francisco declara que la homosexualidad es un pecado, pero al mismo tiempo pidió la abolición de las leyes en contra de la comunidad LGTBIQ+.

El Papa Francisco en una de las ceremonias fúnebres del ex Papa Benedicto en la Plaza de San Pedro en el Vaticano.Créditos: REUTERS / YARA NARDI
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El papa Francisco vuelve a crear polémica por sus declaraciones con respecto a la comunidad LGTBIQ+, ya que aseguró que "ser homosexual no es un delito" aunque "sí es un pecado".

El Papa también pidió la abolición de las leyes en contra de la comunidad LGTBIQ+, que los obispos les integren dentro de la Iglesia porque "Dios ama a todas las personas por igual"

Su primera entrevista tras la muerte de Benedicto XVI

El pontífice ha calificado de injustas las leyes que criminalizan a las personas LGTBIQ+ y ha hecho un llamamiento a los miembros de la Iglesia para no discriminarlas advirtiéndoles y que hay que distinguir entre "pecado y delito".

Si bien el Papa opina que "ser homosexual no es un delito", deja claro que los actos homosexuales son "intrínsecamente desordenados" en su primera entrevista tras la muerte del anterior Papa Benedicto XVI.

En ella, Francisco reconoce que hay obispos católicos que apoyan las leyes que criminalizan a las personas que integran esta comunidad y se refirió a la homosexualidad como "un pecado", al igual que lo es la "falta de caridad".

Contra las leyes anti LGTBIQ+

El Papa explica que las actitudes homófobas de obispos católicos se deben al contexto cultural y que deben iniciar "un proceso de conversión" para reconocer la dignidad de todos y mostrar "ternura, como la que tiene Dios con cada uno de nosotros". 

"Somos todos hijos de Dios y Dios nos quiere como somos y con la fuerza que luchamos cada uno por nuestra dignidad", ha afirmado el Papa. 

Ser homosexual es delito en 67 países

Según The Human Dignity Trust, un total de 67 países penalizan las relaciones sexuales consensuadas entre personas del mismo sexo y 11 de ellos aplican la pena de muerte. 

Una pareja gay ondea la bandera LGTB frente al Vaticano / Cromosomax

Ante esto, el papa Francisco ha calificado de "injustas" estas normas y dijo que la Iglesia católica puede y debe trabajar para ponerles fin. "Tienen que hacerlo", insistió.

Naciones Unidas ha pedido de forma reiterada que se abandonen las leyes que penalizan la homosexualidad y afirma que violan los derechos a la privacidad y a la libertad ante la discriminación, además de incumplir las obligaciones de esos países según el derecho internacional de proteger los derechos humanos de todo el mundo, sin importar su orientación sexual o identidad de género.

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