¿Te suena el término disforia postcoital? Esto es lo que hace que llores después de tener sexo y que no sepas por qué. Si estás leyendo esto, es posible que alguna haya llegado a tener relaciones sexuales con alguien que te gusta mucho, y al final, lo que prometía ser una experiencia increíble, termina siendo algo triste, empiezas a llorar y tu compañero o compañera sexual te pregunta si todo está bien, a lo que no sabes dar respuesta.
Estamos ante un problema que hay que trabajar para solucionar, porque estas sensaciones, prolongadas en el tiempo, reducirán sobremanera tu apetito sexual, hasta el punto de que automáticamente relaciones el sexo con un mal rato.
¿Por qué lloramos después de tener sexo?
Algunas personas podrían tomarse esto a broma, pero el caso es que un estudio realizado por Schweitzer, O’Brien y Burri en 2015, el cual fue realizado a un total de 232 mujeres universitarias, reflejó que un 46 por ciento había sufrido esta situación, al menos una vez en su vida.
Todo esto se debe a la ya mencionada disforia postcoital, que refleja cuando se siente tristeza, melancolía, e incluso dolor o malestar después de tener relaciones sexuales, sin un motivo al que se le puedan atribuir esos sentimientos. Todo esto es a causa de las respuestas que envía nuestro cerebro en ese momento.
- Si tras el orgasmo, tu cerebro envía prolactina, tendrás más ganas de dormir, es más común en hombres.
- Si tu cerebro envía oxitocina, será la responsable de que quieras intimar con la otra persona.
- Si te dan ganas de sonreír, tu cerebro habrá enviado endorfinas.
En resumen, si después de tener relaciones, sientes desasosiego, pena o tristeza, se debe a este bajón posterior al orgasmo, si esto se prolongase en el tiempo, lo recomendable es acudir a un especialista, ya que mantener relaciones sexuales de calidad, también es salud.
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