Según ha publicado el portal estadounidense Page Six, el exdeportista Tom Brady, de 45 años, y la modelo brasileña Gisele Bündchen, de 42 años, han contratado abogados para iniciar su divorcio. Además, la pareja ha estado viviendo por separado durante los últimos dos meses tras una fuerte discusión que mantuvieron.
Brady y Bündchen llevan casados desde 2009 y anteriormente han tenido varios amagos de separación. Sin embargo, parece que está es la definitiva. Ambos comparten dos hijos, Benjamin, de 12 años, y Vivian, de 9.
Una fuente cercana al matrimonio ha desvelado a Page Six que la pareja ha contratado a abogados para iniciar el proceso de divorcio. "No creo que ahora haya vuelta atrás. Ambos tienen abogados y están estudiando lo que supondrá una separación, quién se queda con qué y cuáles serán las finanzas", ha desvelado la fuente.
Una separación millonaria
La pareja solicitaría el divorcio en Florida, ya que ahí es donde residen principalmente, dicen los expertos legales. Otra fuente que conoce a la pareja confirma que están considerando dividir sus activos, que incluyen una cartera de propiedades de $26 millones.
Brady es el jugador de la NFL mejor pagado con 250 millones de euros, con acuerdos de patrocinio que incluyen FTX, Hertz, la marca BRADY, Autograph y TB12.
Asimismo, en diciembre de 2020, la pareja se compró una casa de 7 millones de dólares en Miami, apodada "Billionaires Bunker." Brady y Bündchen planeaban derribar la mansión de 480,50 metros cuadrados y cinco dormitorios y construir una nueva.
La pareja también posee un apartamento en el 70 de Vestry St. en Tribeca, valorado en 3,6 millones de euros, así como una propiedad de 5,7 millones de euros en el Yellowstone Club del promotor Mike Meldman en Montana.