EN ALEMANIA

Activistas se pegan al suelo para protestar sin pensar que no podrían ir al baño

Un grupo de manifestantes por el cambio climático se quedaron solos toda la noche en un concesionario Volkswagen. Se quejaron en las redes de que el dueño no les proporcionó comodidades para protestar.

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Escrito en INTERNACIONAL el

Activistas ecológicos miembros del grupo ‘Scientist Rebel’ han protagonizado una bochornosa protesta contra el cambio climático en un concesionario Volkswagen en Alemania. Los manifestantes decidieron pegar sus manos al suelo del local para protestar, tal como hicieron las dos jóvenes de 'Just stop oil' luego de lanzar sopa contra una pintura de Van Gogh en Londres, sin embargo les salió mal la jugada.

Es que al finalizar la jornada, el dueño del concesionario simplemente apagó las luces, la calefacción, se fue del lugar y los dejó encerrados, mientras ellos aún seguían pegados. Ante ello, uno de los ecologistas reclamó en Twitter que el fabricante de automóviles aceptó su derecho a protestar, pero se olvidó de facilitarles su accionar.

“Rechazaron nuestra solicitud de proporcionarnos un recipiente para orinar y defecar de manera decente mientras estábamos pegados, y apagaron la calefacción”, dijo uno de los manifestantes, Gianluca Grimalda.

Las imágenes de la manifestación se compartieron en Twitter y mostraban a seis de los manifestantes pegados al suelo frente a tres Porsches. El grupo, que vestía batas de laboratorio, se tuvo que quedar en el lugar sentados en el suelo con las piernas cruzadas y las manos pegadas.

“No podemos pedir nuestra comida, debemos usar la proporcionada por Volkswagen. Luces apagadas. Controles aleatorios sin previo aviso por parte de guardias de seguridad con antorchas brillantes”, ha agregado Grimalda.

El grupo ‘Scientist Rebel’ se promocionan a sí mismos como científicos "dispuestos a decir la verdad sobre la crisis climática y actuar en consecuencia". Por ello, para su protesta decidieron instar a Volkswagen, uno de los fabricantes de automóviles más grandes de Alemania, a intensificar la lucha contra la contaminación. Pero las cosas no les salieron como esperaban.

Más activistas pertenecientes a esta agrupación ecologista se unieron a la protesta después de que el personal de Volkswagen se marchara del lugar y permanecieron afuera del establecimiento, ofreciéndoles apoyo moral.

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