El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha visitado las zonas afectadas por el incendio en Castellón, y a la par ha anunciado que el Consejo de Ministros aprobará este martes la declaración de "zona catastrófica" para los territorios afectados por los grandes incendios durante este verano, que incluye tanto a los de Bejís como a Vall d'Ebo.

Sanchez, quien estuvo acompañado por el ministro del Interior, Fernando Grande Marlaska; el presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig; y la delegada del Gobierno en la Comunidad Valenciana, Pilar Bernabé; ha pedido unidad ante la "emergencia climática" a la vez que que ha alabado el trabajo de los bomberos, brigadas forestales, servicios de la Diputación, municipales y protección civil: "No ha habido pérdidas humanas que lamentar y ahora toca reconstruir", indicó.

En rueda de prensa, el presidente ha recordado que este es el verano más caluroso desde 1961 y ha señalado que ya se han calcinado más de 223.000 hectáreas mientras que más de 270.000 personas han tenido que ser desalojadas en toda España. "Por desgracia, nos dice la ciencia que estos próximos veranos vamos a tener temperaturas más calurosas", ha agregado, y ha subrayado la emergencia climática, que "está y es más real que nunca".

Luego, ha pedido apoyo al real decreto ley por el que se aprueban medidas frente a incendios forestales que se convalidará previsiblemente el jueves en las Cortes Generales y para lo que ha reclamado el apoyo de los grupos parlamentarios.

"Me gustaría pedir a los grupos parlamentarios que abandonemos cualquier tipo de lucha partidista y aprobemos lo que es de sentido común; todas las administraciones tenemos que pertrecharnos con mayores recursos y reforzar la cooperación institucional para hacer frente a un enemigo común que son los incendios", ha asegurado Sánchez.

Por último, Sánchez ha dicho que desde la Delegación del Gobierno en Valencia "se agilizarán todas las ayudas para recuperar el paisaje", y se ha referido "al golpe psicológico que supone para los vecinos y los ciudadanos en general" en términos de pérdida de bienes y de biodiversidad.

El Consell también ha anunciado ayudas propias para los damnificados por los incendios, que se centrarán en la reparación de bienes inmuebles, ya sean viviendas, terrenos agrícolas o explotaciones ganaderas. Estas ayudas serán complementarias a las derivadas de la declaración de zona catastrófica.

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