Alexia de los Países Bajos se anima a probar nuevas cosas y a pesar de tener tan solo 18 años, no tiene verguiza de mostrarse tal cual es. La princesa terminó el bachillerato y ahora se tomará un año sabático para escapar de la rutina, mientras su hermana mayor, Amalia, suele estar más presente en los actos protocolares ya que se la heredera a la corona.

Tanto Máxima de los Países Bajos como toda la familia real, pasaron la Navidad del año pasado escapando del frío europeo y llegó al calor que suele haber en esas fechas en Argentina, el país natal de la reina consorte. Estuvieron en Villa La Angostura, una localidad de la provincia de Neuquén, en la Patagonia, donde suelen ir en esas épocas.

Alexia de los Países Bajos y su familia disfrutaron de los paisajes montañosos y nevados que suele ofrecer la Cordillera de Los Andes, en un barrio cerrado llamado Cumelén, que cuenta con 230 hectáreas, canchas de tenis y golf, y está rodeado de lagos y montañas. En esos lugares se puede practicar senderismo, equitación, ciclismo y pesca.

A Máxima de los Países Bajos le sirve volver a Argentina para encontrarse con los suyos, mientras le muestra los hermosos paisajes de su país a su familia. Previo a ir a la Patagonia, estuvieron en la ciudad capital, Buenos Aires, disfrutando de las bondades que ofrece la noche porteña que es muy parecida a las de Europa.

En dicha ciudad, Alexia de los Países Bajos aprovechó la oportunidad para ir a una reconocida discoteca, en la que pudo bailar y pasar buenos momentos. Se trata del boliche Tequila, ubicado en Palermo, mientras su custodia la esperaba en la puerta. Este club nocturno está en la costanera de la ciudad, cercana al Río de La Plata, y solo se puede acceder por membresía.