La Casa del Dragón sigue alimentando el debate sobre los villanos de la serie. La estrella Olivia Cooke, quien interpreta a Alicent Hightower, ha hablado acerca de ello. La precuela de Juego de Tronos es una adaptación de Fuego y Sangre, la novela de George R.R. Martin que cuenta toda la historia de la dinastía Targaryen. Más concretamente, se centra en el contexto histórico de la Danza de los Dragones, la Guerra Civil Targaryen que comenzó a ser el principio del fin.

Olivia Cooke ha hablado con Deadline acerca de la moralidad de su personaje. Ha afirmado que no interpreta a Alicent como si fuera una villana, aunque entiende por qué los espectadores la consideran como tal. De hecho, la mayor parte de los espectadores de La Casa del Dragón han condenado a la reina de Poniente tras el golpe de Estado perpetrado. Sin embargo, también hay una parte de la audiencia que ve el lado positivo del personaje y tiene empatía con ella.

"Nunca la he interpretado como una villana. Sé que toma decisiones moralmente cuestionables y sus reacciones pueden ser bastante groseras, por ser generosa. Pero tengo que creer en lo que hace para poder interpretarla con absoluta honestidad y verdad. Tengo que empatizar con Alicent y saber que todo lo que hace es por amor, por proteger a sus hijos. Creo que, a veces el discurso de las redes puede ser demasiado maniqueo".

Los cambios con respecto al libro están completamente justificados

Lo cierto es que George R.R. Martin planteó una Alicent Hightower mucho más maniquea que la versión que tenemos en La Casa del Dragón. A fin de cuentas, aquella versión procede de diversas fuentes, algunas muy poco fiables como la de Champiñón, el bufón de Rhaenyra. Por eso la serie de HBO ha traído a los personajes bajo una nueva luz, un foco diferente. Por ese motivo tenemos una versión de Alicent radicalmente distinta.

El personaje de Olivia Cooke se ha vuelto mucho más comprensiva como personaje. Sus acciones, aunque sean hipócritas, son la causa de una falta de control en su vida. Lo único que hace es sobrevivir en una sociedad marcadamente masculina. Por ello, abraza la tradición y el deber en un intento de dar sentido al lugar en el que se encuentra. La serie de La Casa del Dragón incluso ha justificado el golpe de estado de Aegon II con los delirios del moribundo Viserys en su lecho de muerte.

Síguenos en Google News para no perderte nada.