Ha sido un año difícil para los consumidores. La inflación no ha dejado de crecer. Los tipos de interés se han disparado hasta límites inimaginables. El mercado inmobiliario ha empezado a enfriarse. Esto plantea una pregunta con las vacaciones navideñas a la vuelta de la esquina: ¿están los compradores exhaustos? ¿Hay margen para hacer compras? Esta semana saldremos de dudas.

La realidad en la que estamos actualmente

En los próximos días se publicarán muchos datos que darán pistas importantes sobre la salud de la economía. Además de una serie de informes sobre los beneficios del comercio minorista, podremos auscultar las cifras de las ventas minoristas de octubre. Los economistas prevén un aumento mensual del 0,9 por ciento. Las ventas se mantuvieron sin cambios en septiembre, una posible señal de que la inflación está haciendo mella en los consumidores.

Las cifras más recientes del Índice de Precios al Consumo proporcionaron cierto alivio a los compradores y a Wall Street. El ritmo de los aumentos de precios interanuales se ralentizó más de lo previsto, lo que provocó una enorme subida de la bolsa el jueves. Varios de los principales minoristas también están a punto de informar de sus resultados del último trimestre y potencialmente dar perspectivas sobre las ventas para los próximos meses.

¿Por qué no han disminuido las compras por la inflación?

La gran pregunta que se hacen los minoristas es si son capaces de seguir subiendo los precios. Hasta ahora, los consumidores han seguido gastando a pesar del encarecimiento. A ello contribuye, por supuesto, el hecho de que el crecimiento salarial se haya mantenido bastante sólido. 

"Los minoristas han sido capaces de trasladar a los consumidores el aumento de los precios de producción y mantener unos sólidos márgenes de beneficio sobre el coste", señalan los economistas de Moody's en un reciente informe de perspectivas para 2023.

Los economistas de Moody's añadieron que la buena salud del mercado laboral es una de las razones por las que las tendencias de la demanda de los consumidores "se han mantenido extraordinariamente resistentes". Aun así, algunos expertos temen que los minoristas sigan teniendo dificultades en 2023. Es posible que los consumidores tengan que vigilar sus carteras más de cerca a medida que aumenta la preocupación por una inminente recesión económica.

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